BERENJENA
(Solanum melongena)
Se conocen tres subespecies del género Solanum: esculentum, a la que pertenecen la mayoría de variedades; insanum, con un número reducido de especies cultivadas y ovigerum, que sólo tiene interés ornamental. Las especies salvajes de berenjena producen unos frutos amargos con espinas dorsales agudas en la mayoría de las partes de la planta, incluyendo el cáliz de la fruta.
A diferencia de otras solanáceas como la patata, el tomate o el pimiento, que vienen de América, la berenjena es originaria de Asia. Es una planta milenaria que entró en Europa durante la Edad Media por medio de los árabes. Ha estado presente, y sigue estándolo, en las tres culturas que bañan el mar Mediterráneo. Eso sí, su sabor un tanto amargo (cada vez menos), y que no es adecuado tomarla cruda porque puede dar desarreglos estomacales, la dejó relegada tiempos atrás a ser un mero objeto decorativo.
No es un ingrediente que haya tenido una gran trascendencia en los últimos tiempos, más bien ha estado marginado, quizá porque no destaca por su sabor ni por su precio. Hay otros países donde sí tienen a la berenjena como una parte importante de su gastronomía. Por ejemplo India, de donde es originaria, y China, países que son los grandes productores mundiales.
La clasificación de la berenjena atiende a su forma (globosa, larga, delgada…), determinada por la variedad de que se trate. Estamos acostumbrados a ver el mismo tipo de berenjena al ir a comprarlas, como si fuera una pera grande de color violeta, pero se pueden encontrar alargadas e incluso de color blanquecino. La variedad tailandesa, por ejemplo, puede ser tan pequeña como un huevo.
La berenjena es un alimento con propiedades desintoxicantes. Por un lado, ayuda al organismo a eliminar toxinas mediante una suave acción diurética producida por su elevado contenido en potasio. Así, la berenjena sirve para paliar los edemas y para controlar la tensión arterial en personas hipertensas. Por otro lado, la berenjena es un alimento laxante, ideal para reeducar un intestino perezoso.
Nombre científico: Solanum melongena L.
Nombre en español : Berenjena
Nombre en gallego y portugués: Beringela
Nombres en otros idiomas: Egg plant (inglés), Eierfrucht (alemán), Aubergine, mélongène (francés), melanzana, pomo d´amore, petonciano, muligiana (italiano).
VARIEDADES
Belleza negra (Solanum melongena)
Categoría: Fruto Cantidad aprox: 0,5 gramos Durabilidad: 4 años Maduración: 80 días Siembra: Marzo a junio
Características: Planta de tamaño medio y elevada producción. Necesita elevadas temperaturas y exposición al sol para su desarrollo y floración. Fruto de forma redonda, textura lisa y color muy oscuro. Se recomienda pre-germinar la semilla, manteniendo la semilla durante 5-6 días en un paño caliente
y luego sembrar. Asociar con judía de mata baja, lechuga, guisante, patata y pimiento. Marco de plantación: 70x50 cm.
HISTORIA
CARACTERÍSTICAS
CULTIVO
Solanum deriva de Solari (calmar, aliviar), y se refiere a los efectos sedantes de algunas especies de este género de plantas. Melongera significa “parecida a la manzana”, por la forma del fruto de eta planta. Avicena desaconsejaba su consumo porque consideraba que provocan la lujuria. Nunca fue una planta muy apreciada en la Antigüedad, cuando la llegaron a denominar “mala insana” (manzana insana) porque sus frutos verdes son discretamente tóxicos, y porque se asemeja a otros tipos de solanáceas cuyo fruto no es comestible.
España fue el primer país occidental en hacer uso culinario de la berenjena. Fueron traídas por los árabes, y hay constancia de su cultivo en las huertas levantinas y andaluzas.
En la alta Edad Media la berenjena se introdujo en América por los Españoles, en la época de la colonización. Trasladando su cultivo y las diferentes formas de prepararla para su consumo. Con el paso de los años, naturalmente, los habitantes del nuevo continente fueron adaptando esta hortaliza a su gastronomía.
Los franceses no la descubrieron hasta el siglo XVII.
Familia: Solanáceas/solaneas/solaníneas
La planta se describe como herbácea anual o perenne o arbusto de porte erecto y hasta 2,5 m de altura, autógamos, con pubescencia estrellada y espinosa.
Las hojas son simples, alternas, ovadas u oblongo-ovadas, con unos 5 pares de nerviaduras laterales y borde entero.
Las flores son hermafroditas y masculinas con cáliz espinoso y corola azul, violeta o purpúrea, con 5-8 lóbulos.
El fruto es una baya, oblonga, ovoidea o subglobosa, de 4-30 cm de longitud, de color violeta, púrpura oscuro, negruzco, blanquecino o con un veteado blanco-violáceo, cuyo interior contiene numerosas semillas englobadas en un tejido blanquecino y esponjoso.
Las semillas tienen forma de disco o de riñón y son aplanadas y de color amarillo pálido o pardo claro.
Es aconsejable sembrar las berenjenas aproximadamente diez semanas antes del periodo de trasplante a una temperatura ligeramente superior a la que se necesita para la germinación de los tomates. Es preferible aclimatar las plantas antes de trasplantarlas definitivamente en el jardín.
La siembra siempre se realiza con calor, entre 18 y 22 ºC desde finales de febrero en las regiones de clima más benigno y en abril en el resto. Un pequeño truco facilita la germinación de las semillas y permite obtener una siembra más homogénea. Consiste en colocar las semillas en el recipiente de verduras del frigorífico entre cuatro y ocho día. Luego se disponen en semilleros, mini macetas,… usando un mantillo y cubriéndolas con una capa fina. Mantenerlas húmedas durante todo el cultivo. Colocarle una fuente de luz y la germinación se produce de ocho a doce horas después.
Dejar crecer los plantones hasta que tengan 5-6 hojas. Antes de la plantación definitiva (efectuada entre mayo-junio) se recomienda endurecer los plantones sacándolos a última hora de la mañana y entrándolos al final del mediodía durante una semana.
Ciclo:
precoz o tardío, pues la planta ocupa el terreno durante 140-200 días.
Clima: Templado-caluroso. No soporta interrupciones de desarrollo. Temperatura ideal de crecimiento: 21-29ºC.
pH:
5,5-7
Marco de plantación:
50 cm x 80 cm
Riego:
Abundante en la base pero sin mojar las hojas. Puede ayudar a esto una buena capa de paja empapada.
Cuidados especiales:
La poda es uno de los cuidados que facilita el crecimiento de las berenjenas y permite limitar el número de frutos. Para ello, hay que eliminar los bordes laterales para mantener únicamene el tallo principal. Seguidamente, despuntar por encima de la segunda flor para obtener tres o cuatro ramificaciones, que también cortará por encima de la segunda flor. Lo ideal es conservar entre 8-10 frutos por pie. Cuando estén formados, despuntar el extremo de los ramos y eliminar los chupones o brotes en la axila de las hojas.
Remover la tierra y escardar con frecuencia el pie de la planta para ventilar bien el sistema radicular superficial de la berenjena.
Es muy exigente en calor y madura difícilmente bajo el frío.
COSECHA
SUELO
FERTILIZACIÓN
Comienza unos cinco meses después de la siembra y se prolonga hasta las primeras heladas. Desde agosto a octubre, hay que cosechar las que estén bien coloreadas y flexibles bajo presión de los dedos, pero sin estar blandas, cortando el pedúnculo espinoso con unas tijeras de podar.
Lo mejor es recoger las berenjenas para consumirlas en los dos días siguientes, pues es cuando son mejores. A principios de otoño la calidad de los frutos es menor.
En octubre, cuando se haya finalizado la cosecha, arrancar todas las plantas y quemarlas para incorporar las cenizas al compost.
Es poco exigente, no obstante, los suelos más adecuados para su cultivo son los francos y profundos. En suelos arcillosos pueden presentarse problemas de asfixia radicular. Los valores óptimos de pH del suelo oscilan entre 6 y 7, aunque en suelos enarenados puede cultivarse con valores de pH comprendidos entre 7 y 8,5. En suelos ácidos se presentan problemas de crecimiento y producción.
Es una planta poco exigente pero hay que cuidar la fertilización nitrogenada con el fin de evitar un excesivo desarrollo vegetativo. Fertilizar con bastante P y K.
A fin de favorecer un crecimiento armonioso y una buena fructificación, se aconseja utilizar un abono muy maduro o estiércol bien descompuesto.
POLINIZACIÓN
Las flores de berenjena son perfectas y autofecundas. Sin embargo, pueden manifestarse hibridaciones intervarietales, cuya frecuencia varía según el entorno, la naturaleza y la cantidad de insectos polinizadores. El modo de reproducción de la berenjena es pues una autogamia preferencial.
En regiones de clima templado, se aconseja separar las diferentes variedades a una distancia de 50 metros. En regiones de clima tropical, se aconseja separar diferentes variedades a una distancia de 500 metros a 1 km. Hemos podido observar, por ejemplo, en el sur de la India, flores de berenjena visitadas regularmente por mariposas, abejas solitarias o avispas albañiles.
En cambio, podemos plantar berenjenas al lado de otras variedades pertenecientes a especies diferentes: Solanum melongena, Solanum macrocarpon y Solanum aethiopicum. En efecto, no existen hibridaciones ínter-específicas, sólo posibilidades de hibridaciones intervarietales.
PROBLEMAS
La berenjena es la planta favorita de las doríforas (Leptinotarsa decemlineata), por lo que algunos jardineros colocan a veces algunas plantas en medio de su huerto de patatas para atrapar a estos insectos. Babosas y caracoles son otros de los principales problemas pues se comen las hojas anchas de las berenjenas. Un remedio ecológico es rodear la planta con una barrera de ceniza, poso de café o serrín.
Para luchar contra el mildiu, regar el suelo en la base, repetidas veces, a partir de junio con purines de ortiga diluidos al 10-20% o con una decocción de cola de caballo.
Los pulgones pueden ser particularmente molestos; para ello se pueden pulverizar las plantas con una solución concentrada de jabón de lagarto.
Cuando se cultiva en invernaderos puede sufrir una anomalía conocida con el nombre de ahilado, que produce diversos desarreglos: Excesivo desarrollo de ramas, hipertrofia de las hojas que se alargan y ensanchan, Malformación de flores, frutos deformes, pequeños y muy esponjosos.
Las causas principales de este problema son la falta de iluminación en las primeras fases de desarrollo de la planta, y agravado por un exceso de humedad existente en estos invernaderos. Las técnicas que contribuyan a favorecer la transpiración de este cultivo, ayudaran a evitar estos problemas.
APORTACIONES NUTRICIONALES
Su valor energético y nutritivo, comparado con otras hortalizas es menor, contiene pocas calorías, cierta cantidad de hidratos de carbono, pocas proteínas y nada de grasas.
Su contenido en agua es elevado (92%), la cantidad de fibra es moderada, y es rica en minerales como el potasio, calcio, azufre, y hierro, como así también en vitaminas B y C.
Es importante señalar que para algunas personas sensibles, la berenjena no está muy recomendada, puesto que contiene aminas (serotonina y tiramina), que pueden provocar reacciones alérgicas o dolores de cabeza.
ASOCIACIONES
CAPACIDAD GERMINATIVA
RECOGIDA SEMILLAS
Asociaciones favorables: Judía enana, lechuga, guisante, patata, pimiento.
Asociaciones desfavorables: Hinojo.
Las semillas de berenjena tienen una duración germinativa media de 6 años. Éstas pueden, sin embargo, conservar una facultad germinativa hasta de 10 años.
Un gramo contiene unas 240 semillas.
Las semillas de berenjena son fecundas sólo cuando son recolectadas en los frutos completamente maduros, es decir, cuando comienzan a marchitarse adquiriendo un colorido amarillo o café. La extracción de las semillas es mucho más laboriosa que la de los tomates o los pimientos. Podemos utilizar métodos secos o húmedos.
Un método seco consiste en batir los frutos cuando están muy maduros a fin de desenganchar las cavidades porta-semillas en el interior de la pulpa. Entonces se abren los frutos y se desalojan las semillas una por una.
Otro método seco, reservado a las regiones muy cálidas, consiste en dejar secar al sol los frutos muy maduros. Y luego desalojar las semillas.
Uno de los métodos húmedos consiste en cortar la berenjena en pequeños cubos y pasarlos por la batidora con agua a pequeña velocidad. Luego se vierte la mezcla en un recipiente y se recuperan las semillas viables que hayan caído en el fondo del recipiente. Se lavan en un colador de malla fina y se ponen a secar sobre un tamiz. Este tipo de extracción también puede llevarse a cabo desalojando las semillas de los cubos pequeños de berenjenas con la ayuda de los dedos.
Es aconsejable secar lo más rápidamente posible las semillas húmedas de berenjena con ayuda de un ventilador, por ejemplo, ya que éstas tienen tendencia a germinar muy fácilmente cuando la temperatura ambiental es muy alta.
RECETAS COCINA
A continuación te ofrecemos una serie de links en los que podrás encontrar más de 1000 maneras diferentes de cocinar la berenjena, para que lo hagas a tu gusto.
TU OPINIÓN
En este apartado queremos colocar las opiniones que recibamos sobre esta hortaliza: que os parece, si os gusta, o no, si conocéis algunas propiedades, como la llaman donde vivís, o alguna anécdota ,..... cualquier cosa que queráis enviarnos a secretaria@fundaciongaliciaverde.org.
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